La ecovía del río Limia, que une los municipios de Viana do Castelo – Ponte de Lima – Arcos de Valdevez, en la orilla derecha del río Limia, y los municipios de Viana do Castelo – Ponte de Lima – Ponte da Barca, en la orilla izquierda, fue diseñada pensando en los peatones y los ciclistas, aunque, salvo raras excepciones, se puede cruzar perfectamente a caballo.
Con niveles de uso que justifican la inversión realizada, la Ecovía, en Ponte de Lima, se divide en cuatro tramos, con una longitud total de 34 km, insertados en el Lugar de Importancia Comunitaria del Río Lima (Red Natura 2000): i) Lagoas, ii) Laranja, iii) Veigas, y iv) Açudes.
Esta infraestructura es un excelente medio para promover el ejercicio físico y dar a conocer los valores paisajísticos y naturales asociados al recurso hídrico, así como las actividades humanas del sector primario, los diversos elementos del patrimonio histórico y cultural, como los molinos, los azudes y los puentes. El centro histórico de Ponte de Lima, la ciudad más antigua de Portugal, se encuentra en el epicentro de las ecovías.
En este contexto, debido a la degradación evidenciada por la plataforma de ecovías, es importante realizar una intervención que restablezca las condiciones necesarias para el pleno disfrute de estas instalaciones, permitiendo así que cumplan con la finalidad para la que fueron construidas.
Aprovechando la oportunidad creada por el Proyecto “Fronteira Esquecida Limia-Lima”, el Ayuntamiento de Ponte de Lima inició, a finales del año pasado, la actuación relativa a la conservación de las plataformas de ecovía en las extensiones previamente seleccionadas. Así, de un total de 7125 m previstos, ya se han realizado 850 m, en los que se ha regularizado la plataforma recurriendo al relleno y a la nivelación con “toutvenant”.
La finalización de toda esta actuación y el inicio y finalización de la ejecución de la actuación de mejora de una longitud total de 1004m (intervención que consistirá en la retirada del material existente en la plataforma y el consiguiente relleno del cajón resultante, previa aplicación de una manta geotextil, con una franja de hormigón en el centro (0,80m) con pavimento portugués a ambos lados, con una anchura máxima de 1,10m, que incluirá también guías de contención), está prevista para este año.